Guía segura y diferentes pasos para alquilar una propiedad en Ecuador

Alquilar una propiedad, tanto para el arrendador como para el inquilino, implica un conjunto de pasos clave para garantizar un proceso seguro y sin contratiempos. En Ecuador, seguir procedimientos correctos y verificar la documentación adecuada son esenciales para evitar futuros problemas. A continuación, te compartimos una guía con los procesos recomendados y buenas prácticas para garantizar un alquiler exitoso.

Documentación básica para el alquiler

Antes de proceder con el contrato, es importante que el agente inmobiliario sollicite y verifique la siguiente documentación:

• Cédula de identidad y certificado de votación: Es fundamental contar con la identificación del interesado en caso de personas naturales, si la propiedad sea esta una casa, departamento, local comercial, oficina o bodega quiere alquilar una persona jurídica se solicita el nombramiento, el Ruc y otra documentación que crean pertinente.
• Certificado laboral o RUC: Si el futuro arrendatario trabaja en relación de dependencia necesita un certificado laboral donde conste su cargo, tiempo laborando y sueldo, es clave para comprobar su estabilidad. En caso de ser una persona jurídica o un emprendedor, se debe solicitar su RUC y las últimas declaraciones tributarias.
• Certificado bancario: Un documento con las cifras promedio de las cuentas bancarias ayudará a verificar la solvencia del interesado.
• Garante: Es recomendable pedir un garante que presente los mismos documentos, para tener un respaldo en caso de que el arrendatario incumpla con el contrato.

Investigación y verificación

Un buen agente inmobiliario no solo recibe la documentación, sino que también realiza una investigación exhaustiva para asegurarse de que el arrendatario sea confiable. Esto incluye:

• Central de Riesgo y buró de crédito: Consultar el buró de crédito del interesado para verificar su solvencia y detectar posibles atrasos en otros compromisos financieros.
• Antecedentes personales y laborales: Investigar si el arrendatario tiene antecedentes delictivos o denuncias en su contra. También es útil corroborar su estabilidad laboral y salario.
• Referencias de alquiler anteriores: Si es posible, obtener referencias de propiedades alquiladas anteriormente puede proporcionar una visión más completa del comportamiento del interesado como inquilino.

Contrato de arrendamiento

Una vez que el agente inmobiliario haya realizado las verificaciones y seleccionado a un inquilino confiable junto con el propietario se definen las cláusulas del contrato se emite un borrador para que ambas partes estén de acuerdo y una vez aprobado se procede con la firma de tres juegos del contrato de arrendamiento. Este debe incluir los siguientes detalles:

• Depósito y pagos iniciales: Generalmente, se solicita un depósito equivalente a dos meses de arriendo y el pago del primer mes por adelantado, esto es a convenir.
• Términos del contrato: El contrato debe especificar la duración del arrendamiento, el monto del alquiler, los plazos de pago, las cláusulas y responsabilidades de ambas partes.
• Firma y notarización: El contrato debe ser firmado por el arrendador, el inquilino y el garante, y luego notarizado para otorgarle validez legal. Es fundamental que cada parte reciba una copia del contrato.

Entrega de la propiedad

Con el contrato firmado y los pagos realizados , se procede a la entrega de las llaves y de la propiedad. En este momento, es importante que ambas partes inspeccionen la propiedad y registren su estado para evitar futuros malentendidos si es que ya no lo hicieron antes en las visitas previas. Se recomienda hacer un inventario de muebles o electrodomésticos en caso de que la propiedad sea amoblada o semi amoblada, y tomar fotos de las condiciones generales del inmueble. Posteriormente se debe entregar una copia notarizada del contrato al inquilino.

Buenas prácticas adicionales para agentes inmobiliarios

1. Transparencia y comunicación clara: Siempre mantén una comunicación abierta y transparente con ambas partes, resolviendo cualquier duda o malentendido de inmediato.
2. Evaluar varias opciones: No te precipites en elegir al primer interesado. Evaluar varias solicitudes garantiza que puedas seleccionar al mejor candidato.
3. Acompañar en cada etapa: Guía al arrendador y al inquilino en todo el proceso, desde la verificación de documentos hasta la entrega de la propiedad, asegurándote de que cada paso se realice correctamente.

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